Reseña 'La peste escarlata' - Jack London

Título: La peste escarlata

Título original: The scarlet plague

Autor: Jack London

Editorial: Libros del zorro rojo

Fecha de publicación: 1912 (original)

Páginas: 113

En 2013 estalla en las principales ciudades de la Tierra una peste fulminante que se propaga con rapidez hasta el último rincón habitado. No hay para ella antídotos conocidos; en cuestión de días, el vano éxodo de los pobladores vacía las ciudades, devastadas por el pillaje, los incendios y la violencia. 

Con el paso del tiempo, unos pocos supervivientes van formando pequeñas comunidades mientras a sus alrededor una vegetación asilvestrada, sin control, ahoga las zonas antes cultivadas, y los animales domésticos, con garras y dientes, tratan de asegurarse un lugar en el nuevo orden zoológico.

Sesenta años después de la tragedia, el último superviviente de la peste -entonces joven profesor universitario y ahora anciano de casi noventa años- intenta al final de su vida transmitir algo de experiencia y sabiduría a sus nietos casi salvajes, evocando un mundo que ya nadie sabe que ha perdido.

Hacía tiempo que no leía un clásico así que, viendo que tenía tan poquitas páginas, no dudé en leerlo. La verdad es que esta lectura se convirtió en una de las mejores de agosto y cómo no. Nada como un buen clásico de vez en cuando.

En 2013 estalló una peste que acabó prácticamente con la humanidad, dejando tan solo a unos pocos con vida. Pero en 2073, 60 años después de la tragedia, un anciano, llamado James Howard Smith, que antes era un antiguo profesor de universidad, cuenta a sus tres nietos cómo era la vida antes de la catástrofe y cómo vivió él dicha tragedia.

No quiero contar mucho más de la historia porque la gracia está en que el lector la descubra por sí mismo por lo fascinante que es. Lo primero que quiero destacar, y lo que más me ha gustado, es la narración. Si ya de por sí es una lectura que se lee rápido por las pocas páginas que tiene, por la forma en la que está contado se lee aún más rápido. Tan solo por la narración ya te quedas enganchado desde el principio. Por otro lado, el libro cuenta con unas ilustraciones (como la de la izquierda) que hacen la lectura mucho más amena y que ayudan a imaginarte la historia mucho mejor. Además de ello, es una historia bastante descriptiva donde se da todo lujo de detalles, cosa que es de lo más normal dado que se describe el ambiente actual, cómo afectaba la peste a las personas y demás. No obstante, esta descripción no se hace para nada aburrida en ningún momento, es más, atrapa al lector. También me ha llamado bastante la atención el poco vocabulario que tienen los nietos del protagonista. Por ejemplo, muchas palabras que para nosotros son sencillas para ellos no lo eran, solo sabían contar hasta diez y no sabían ni lo que era el dinero. También llama la atención que el autor, habiendo escrito el libro en 1912, haya pensado que en 2013 iba a llegar una peste que acabaría con todos nosotros. ¿Os imagináis que eso hubiera pasado de verdad? Da miedo hasta pensarlo.

En esta historia se vuelve a lo primitivo, donde vuelven a existir las tribus y donde hay un cambio en el orden social. Ya no hay clases dominantes, ni ricos ni pobres. Todo ha cambiado. Desde que comenzó la infección la supervivencia se convirtió en lo más importante de todo, tipo a lo The walking dead pero sin zombis. Es increíble cómo reacciona la gente ante una situación así, matan con tal de sobrevivir, roban para sobrevivir... Todo se reduce a sobrevivir. Y si nos damos cuenta, en todas las películas, series y libros apocalípticos siempre plasman a la gente de esta manera y, la verdad, hasta yo me la imagino haciendo tales barbaridades si se diera el caso. Dejando eso de lado, en el libro también se puede encontrar una pequeña reflexión en la que nos da a entender que la vida no es justa y que, personas que merecen vivir, mueren, y que las que menos deberían vivir son las que sobreviven. Señores, la humanidad es frágil y así nos lo enseña el autor en este libro. Ya para terminar, del personaje que más se conoce es del protagonista, el cual me agradó en todo momento aunque, eso sí, me pareció cobarde en algunas situaciones. De los nietos, Edwin, Jujú y Labio Leporino (sí, unos nombres bastante comunes) apenas se les llegan a conocer pero desde un primer momento se ve que son prácticamente unos salvajes y, lo que más pena me dio, es que apenas querían saber cosas del pasado. También aparecen otros personajes, como Vesta Van Warden y El chófer, pero es mejor que los descubráis vosotros mismos.

El libro está contado en todo momento desde el punto de vista del protagonista, James Howard Smith, por lo que al personaje se le llega a conocer a fondo. Respecto al final, me gustó pero me hubiese gustado saber algo más.

En conclusión. La peste escarlata es un libro en el que se nos enseña que la humanidad es frágil y que esta, ante situaciones de pánico, está dispuesta a hacer de todo con tal de sobrevivir. Aparte de ello, la narración te atrapa desde el principio y las escenas, contadas con total lujo de detalles, hacen que no quieras soltar el libro en ningún momento.

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