Reseña | Te doy mi corazón - Julia Quinn. Los Bridgerton #3

Título: Te doy mi corazón

Título original: An offer from a gentleman

Autora: Julia Quinn

Traductora: Amelia Brito

Serie: Los Bridgerton #3

Editorial: Titania

Páginas: 376

Fecha de publicación: 15 de febrero de 2010

La crónica social del 7 de junio de 1815 se hacía eco de la hermosa dama que había sido vista en compañía del codiciado soltero Benedict Bridgerton en el baile de máscaras. Nadie sospechaba que esa misteriosa belleza era la hija ilegítima de un conde, condenada a servir a su despótica madrastra y sus caprichosas hijas. Y nadie habría apostado tampoco que esa pobre niña bastarda, años después, robaría de nuevo el corazón del apuesto Benedict.

 

Reseña "El vizconde que me amó"

A pesar de que la historia me ha gustado, al igual que los protagonistas, esta es la entrega que, por ahora, menos me ha convencido. Por supuesto, esto no quiere decir que no la haya disfrutado, sino que, al ser parecida a la del cuento de Cenicienta, no me impresionó tanto como las demás. Eso sí, lo leí en una lectura conjunta con Paula, de Una vida entre palabras, y me ha encantado la experiencia.

Desde su llegada a Penwood Park una noche de tormenta, con tan solo tres años de edad, todos profesaron un especial cariño hacia aquella pequeña que al parecer era la hija de un viejo y difunto amigo del conde Richard Gunningworth. Poco importaba que tuviera un parecido extraordinario con la madre del aristócrata o que su sonrisa recordara fielmente a la estirpe femenina de tan acaudalada familia. En realidad, Sophie Beckett era la hija ilegítima del conde, pero todos, criados y personal de servicio de la casa, simularon creer a pies juntillas su falsa procedencia sin hacer preguntas sobre su situación. Así fue hasta que el conde Gunningworth contrajo segundas nupcias; su nueva esposa y las dos hijas de esta no soportaron la idea de aquella molesta presencia. La belleza de Sophie, convertida ya es una jovencita, era capaz de rivalizar con la más hermosa de las doncellas, pero su despiadada madrastra tenía en mente arrebatarle sus derechos... algo que conseguiría al morir el conde. Condenada a vivir una existencia de servidumbre y obligaciones, una noche Sophie se escabulle del yugo de su familia adoptiva y, cual cenicienta, asiste a un magnífico baile vestida como una princesa. En aquella mágica velada conocerá a uno de los solteros más codiciados de la sociedad londinense, Benedict Bridgerton, quien, ignorante de la historia de la joven, quedará profundamente hechizado por sus encantos.

El motivo por el que esta entrega no me ha gustado tanto como sus predecesoras es que se repite el cuento de La Cenicienta, cosa que no me ha parecido original. El cuento no se reproduce en su totalidad, como es normal, sino que lo más semejante ocurre al principio de la novela, cuando Sophie decide ir al baile de máscaras que ha organizado la madre de los hermanos Bridgerton. Pero claro, ella no tiene ningún vestido adecuado para la ocasión ni mucho menos dinero para comprar uno, por lo que la señora Gibbons representará el papel de hada madrina. Y es así como Sophie llega a la fiesta cual Cenicienta y sorprende a todos los hombres de la sala, e incluso a las mujeres. Hasta que Benedict se fija en ella y Sophie se fija en él. Él se enamora de la muchacha aun sin saber nada acerca de ella, ni siquiera su nombre, pero justo cuando está a punto de descubrir su identidad, dan las doce de la noche y Sophie tiene que marcharse corriendo antes de que su madrastra la eche de menos en la casa en la que trabaja como criada, dejando tras de sí un guante con las iniciales de su familia. Después de ese encuentro, ninguno de los dos olvida esa noche, pero no será hasta un par de años después cuando volverán a encontrarse. 

En la primera parte del libro, que transcurre en 1815, nos encontramos con una especie de introducción en la que se nos cuenta la infancia de Sophie y cómo conoció a Benedict en el evento que os acabo de narrar. Como habréis comprobado, es muy parecido al cuento de La Cenicienta y, aunque después de ese encuentro tan solo aparece algún que otro matiz del cuento, ya con eso la historia no me pareció tan original. También tengo que mencionar que en esta parte hay más drama que humor y que apenas se ve el sarcasmo que a mí tanto me gusta de los hermanos Bridgerton.

En cuanto a los personajes, a Benedict lo vi algo soso y no tan carismático como los protagonistas de las dos entregas anteriores, pero aun así me ha gustado bastante y en más de una ocasión demuestra ser un Bridgerton de los pies a la cabeza. No se enfada tanto como Anthony, cosa que me gustó, pero no tiene el mismo encanto que su hermano. Lo que más llama la atención de este protagonista es que no quiere que se le recuerde como "el segundo de los Bridgerton", sino que quiere pasar a la historia por algo que haya hecho él mismo, por mérito propio. Sophie es una mujer lista, fuerte y con fuerza de voluntad que saca su genio cuando es conveniente, y por eso mismo me gustó mucho y la convierte en una protagonista perfecta para esta novela. A veces no entendía sus motivos para hacer las cosas, pero en general me gustó mucho. Respecto a los personajes secundarios, tenemos a la madrastra de Sophie, Araminta, una mujer de lo más desagradable y que no dudará en demostrar el poco aprecio que le tiene a su hijastra; Rosamund es la hija mayor de Araminta y es igual de desagradable que su madre; mientras que Posy es la hija menor y la cual, según su madre, no hace nada bien. Esta última hermana me dio mucha pena porque se siente acomplejada por el poco cariño que le profesa su madre y también porque realmente quiere ser como una hermana para Sophie, pero no se atreve a enfrentarse a Araminta. Y es por ello que le he cogido cierto cariño, a pesar de no tener mucho protagonismo en la historia. También habrá más acto de presencia de la familia Bridgerton que en la entrega anterior, cosa que me ha encantado, por lo que podremos llegar a conocer un poco mejor a todos (menos a Gregory, el último de los varones Bridgerton).

La forma de escribir de Julia Quinn sigue siendo igual de exquisita y el final no podría haber sido más bonito y adecuado. Al inicio de cada capítulo sigue apareciendo la sección de cotilleos de Lady Whistledown.

En conclusión: Te doy mi corazón pierde un poco de la esencia Bridgerton, pero sigue siendo una lectura de lo más recomendable. La historia no es tan original como sus predecesoras por haber incluido el "factor Cenicienta" y la pareja no hace tanto uso del sarcasmo como los protagonistas de las entregas anteriores, pero Te doy mi corazón demuestra una vez más el valor que tiene la familia en la vida de una persona y que el amor puede llegar cuando menos te lo esperas.

Puntuación: