Reseña | Piso para dos - Beth O'Leary

Título: Piso para dos

Título original: The Flatshare

Autora: Beth O'Leary

Traductora: María del Mar López Gil

Editorial: Suma

Páginas: 496

Fecha de publicación: 06 de junio de 2019

Tiffy Moore necesita un piso barato, y con urgencia. Leon Twomey trabaja de noche y anda escaso de dinero. Sus amigos piensan que están locos pero es la solución ideal: Leon usa la cama mientras Tiffy está en la oficina durante el día y ella dispone del apartamento el resto del tiempo. Y su modo de comunicarse mediante notas es divertido y parece funcionar de maravilla para resolver las vitales cuestiones de quién se ha acabado la mantequilla y si la tapa del váter debería estar subida o bajada.

Claro que si a eso se añaden exnovios obsesivos, clientes exigentes, hermanos encarcelados por error y, lo más importante, el hecho de que aún no se conocen, Tiffy y Leon están a punto de descubrir que lograr la convivencia perfecta no es fácil. Y que convertirse en amigos puede ser solo el principio...

Piso para dos es un libro que tenía muchísimas ganas de leer desde que se publicó, así que a pesar de tener otras muchas lecturas pendientes, no pude resistir la tentación y lo leí. Me gustó tanto como esperaba que lo hiciera, por lo que ha cumplido mis expectativas, y lo comentaré tanto en el grupo de la lectura conjunta que organizó Oasis literario como en la lectura que organicé en mi club de lecturas conjuntas

En Piso para dos nos encontramos una historia que peca de tópica por tratar un romance entre compañeros de piso, pero es diferente a otras que he leído por el tema tan importante que trata: el maltrato psicológico. El exnovio de Tiffy (del cual hablaré más adelante) es un hombre obsesivo que le hacía creer a la protagonista que ella tenía la culpa de todo (entre otras cosas), por lo que desde el principio encontramos a una mujer que lo ha pasado mal y que intenta pasar página con la ayuda y consejos de sus mejores amigos. Aunque este tema le añade drama a la historia, la autora lo ha sabido manejar fenomenalmente, pues no hace que el drama sea excesivo ni que sea lo principal de la novela; más bien es un complemento que no carga a la historia de un excesivo dramatismo. También hay una parte dramática relacionada con Leon, pero la autora tampoco la recarga. Por lo tanto, el libro en general es romántico, y hasta se podría decir que es una comedia romántica, pues hay varias escenas de humor a lo largo de la novela, pero sobre todo por las conversaciones entre los protagonistas a base de notas. Sin duda, que Tiffy y Leon se comuniquen por notas es lo mejor del libro, pues no solo la protagonista cuenta muchas cosas en ellas con un ligero humor, también porque en las notas podemos descubrir cómo son verdaderamente Tiffy y Leon.

En cuanto a los personajes, me gustó bastante la personalidad de cada protagonista, aunque no empatizara con ninguno. Tiffy es una editora adjunta en una editorial que tan solo publica libros de manualidades, por ejemplo de ganchillo, y es una mujer muy extrovertida, aunque el adjetivo que más la caracteriza es extravagante. Por el contrario, Leon es un enfermero de cuidados paliativos introvertido que muy pocas veces muestra sus sentimientos. Ambos tienen un corazón enorme y poco a poco se van conociendo cada vez más gracias a las notas, por lo que a medida que más se comunican más ganas tienen de conocerse en persona. El romance entre ellos es uno de esos que se cuecen a fuego lento, así que es imposible que no te acabe conquistando. Muchos de los personajes secundarios son muy importantes para el desarrollo de la historia, como los mejores amigos de Tiffy: Mo, Gerty y Rachel. Los tres son un constante apoyo para la protagonista, pero a mi el amigo que más me gustó fue Gerty, pues es una mujer de armas tomar que no tiene pelos en la lengua. Otro personaje secundario importante es Richie, el hermano menor de Leon, el cual me habría gustado conocer más. No obstante, con Katherin las risas están aseguradas, y es que es una señora muy peculiar. Por último, Justin es, quizás, el personaje secundario con más importancia, aunque no sea el que más aparezca. Es el exnovio controlador y obsesivo de Tiffy Como ya podréis intuir, es un personaje que dará más problemas que alegrías, por lo que no me gustó desde que apareció. Manipulaba a la protagonista para que hiciera lo que él quería, así que ya os podéis hacer una idea de qué clase de personaje es. 

La narración es en primera persona desde el punto de vista de Tiffy y Leon y los capítulos son cortos. El libro está dividido en meses y es muy ágil gracias al intercambio de notas entre los protagonistas. La pluma de la autora es sencilla y el final no fue del todo mi gusto por lo precipitado que me pareció, pero el epílogo me encantó. 

En conclusión. He disfrutado bastante leyendo este adictivo y atrapante libro. Cumplió con mis expectativas, aunque sí que es cierto que la parte dramática no me la esperaba, pero aun estuvo muy acertada porque le da un toque de drama a la historia y porque también sirvió para que los protagonistas se unieran aún más. Me ha encantado descubrir la historia detrás de estas páginas y aún más que el romance sea uno de esos que se cuecen a fuego lento. Que los protagonistas se comunicaran a través de notas ha sido lo mejor de la novela, no solo por el toque de originalidad que le da, sino también por el humor que estas desprenden. Los protagonistas están muy bien caracterizados y los personajes secundarios hacen que la lectura resulte aún más interesante si cabe.

Puntuación